En un verdadero cofre de recuerdos, lleno de honores y gloria para la región Lambayeque, se ha convertido la Sociedad de Tiro Elías Aguirre Chiclayo 77. El próximo 11 de setiembre se cumplen 112 años de su fundación bajo la mirada de Miguel Grau y el revólver de Francisco Bolognesi.
En pleno corazón de Chiclayo (cuadra 1 de la calle Elías Aguirre), desde hace más de 100 años cada día surgen conversaciones que tienen que ver con todo lo que va pasando en nuestra querida “Capital de la Amistad”. Deporte, patriotismo, política, sociedad, todo tema es bien recibido por quienes se congregan en el céntrico local de la Sociedad de Tiro Elías Aguirre Chiclayo 77.
La bandera de la amistad está presente en fraternos días y noches para hacer realidad los sueños de sus socios que valoran el esfuerzo de quienes lucharon en la infausta guerra con Chile. Fue precisamente a raíz de dicha contienda bélica, que los peruanos empezaron a agruparse en clubes para adiestrarse en el manejo de armas. Así, en Perú nacieron la Sociedad de Tito Barranco Nº 1 en Lima y Bellavista Nº 2 en el Callao. Chiclayo también hizo historia con su propio club.
Un grupo de integrantes de la Sociedad de Tiro Nº 77, luego de un desfile institucional.
- chiclayo 77
El 11 de setiembre de 1902, a las 3:00 p.m, se reunieron entre otros el prefecto de Lambayeque, Juan Manuel Pedro Blas Oscar Grau Cabero –hijo del héroe de Angamos Miguel Grau Seminario—el alcalde de Chiclayo Wenceslao S. Salazar; Pablo Pestana y Guillermo Gamarra, delegados del Club de la Unión; Juan Manuel Colmenares y Moisés Escurra delegados del Club "Instrucción y Recreo"; Ignacio Arrincón León y Nicanor Silva, delegados de la “Sociedad Obreros de la Unión” y el Secretario de la Prefectura, Germán Amat León, más una pléyade de ciudadanos ilustres. En dicha cita se firma la partida de nacimiento del “Club Departamental de Tiro al Blanco”. Su primer presidente fue el prefecto Oscar Grau Cavero, fallecido en Lima el 31 de julio de 1939.
Las bases de esta institución centenaria, se resumieron en “acoger a los socios de las instituciones fundadoras y a los vecinos del departamento para que se adiestren en el manejo de las armas de fuego”. La razón de ser de dicho club sería la práctica de tiro y por lo tanto, ocuparse de la construcción de una Galería de Tiro al Blanco con rifle.
El nacimiento de dicha institución fue producto de largas reuniones que ilustres caballeros desarrollaron meses antes en la casa prefectural de Lambayeque. Es meritorio destacar que desde sus inicios, dicha institución demostró su amor a la patria y comunidad, haciéndose presente en todo tipo de reuniones y eventos de interés general. Además, siempre ponía a disposición lo poco que tenía.
Fue una labor titánica construir la Galería de Tiro al Blanco y todos hacían fuerza común para abastecer no sólo de armas al club, sino también colaborar con adobes, caña brava, piedra de cerro, transporte y todo el material que se requería. El día esperado llegó el 17 de abril de 1904, pero la inauguración de la ansiada galería se vio empañada por el desborde de la acequia Patazca. El mal momento se superó y los socios continuaron trabajando hasta remodelar y hacer realidad el patio de ingreso, el salón principal, una glorieta, entre otros ambientes.
El 23 de junio de 1909, el Ministerio de Guerra, con Resolución Ministerial, reconoce oficialmente el funcionamiento del club y le da el Nº 77. A partir de entonces se convierte en “Sociedad de Tiro Chiclayo Nº 77”. Desde esa fecha, en todo el país las instituciones que tenían armas de fuego, debían ser controladas por el Ejército, lo que trajo como consecuencia la desactivación de varios clubes que practicaban tiro.
Daniel Tantalean, Francisco Carvajal Atencio y Paul Freire Mantero, lucen sus medallas obtenidas en el 2013
El local de la Sociedad de Tiro se ubica en una zona de privilegio y durante años fue silencioso testigo de las transacciones que a diario se realizaban en la estación de Ferrocarril de Eten, emporio de trabajo y riquezas. Se transportaba pasajeros y carga, proveniente de las haciendas azucareras de Pomalca, Cayaltí, Pucalá, Vista Alegre, Tumán, Pátapo, Ferreñafe, Monsefú, que se interconectaban unas a otras con los principales puertos de la época que eran Eten y Pimentel, donde descargaban la producción azucarera para su exportación hacia el extranjero.
En octubre de 1976, una directiva múltiple de la Dirección General de Tiro del Perú, solicitó que todas las Sociedades de Tiro en el país, llevaran el nombre de un héroe de su tierra. La de Chiclayo eligió el nombre de Remigio Elías Aguirre Romero, valeroso y destacado marino peruano, héroe de la Guerra del Pacífico. Como segundo comandante del monitor Huáscar, murió en el combate de Angamos el 8 de octubre de 1879.
Originalmente esta sociedad fue propietaria de 14,323.30 m2 de terreno, donde debía construirse su local social y galería de tiro para armas cortas y largas. Con el paso de los años el terreno se ha reducido pero existe el deseo de sus socios, de seguir trabajando por brindarle a Chiclayo lo mejor en recreación deportiva.
- tiro al blanco
Disparar con el rifle o la escopeta tiene sus antecedentes en la prehistoria. Grabados hallados en cuevas, vasijas y ornamentos antiguos, demuestran que en las primeras culturas, el tiro en sus formas más primitivas a modo de lanzamientos, era base fundamental de su civilización. Esto aseguraba la subsistencia alimentaria, además de brindar entrenamiento en momentos de ocio. Muchas veces la primera presa obtenida a través del lanzamiento marcaba también, el paso de la niñez a la madurez.
En el XIV Campeonato Interclubes y IV Campeonato Interfederaciones de Tiro al Blanco (2013), Chiclayo obtuvo importantes galaRdoNes.
El primer club de tiro, el Lucerne Shooting Guild, en Suiza, se formó alrededor de 1466 y tuvo buenos resultados ya que en Europa y Estados Unidos la gente se fue sumando rápidamente a este deporte durante el siglo XIX. El primer concurso de tiro del que se tiene constancia documental se celebró en Zurich en 1472. Entre federaciones de tiro fundadas en aquella época sobresalen además la inglesa en 1859, la alemana en 1861, la francesa, húngara y estadounidense en 1871.
En 1896, los Juegos Olímpicos Modernos de Atenas incluyeron a este deporte gracias al barón Pierre de Coubertin, quien fue 7 veces campeón con pistola libre. Este deporte tenía el número más alto de participantes en estos primeros juegos olímpicos.
El primer campeonato del mundo de tiro fue organizado en 1897 en Francia, y ocho federaciones nacionales estuvieron presentes y las cuales fundaron “a las federaciones y Asociación Nationales de Tiro del DES de Internationale de la unión” el 7 de julio de 1907 en Zurich, Suiza.
En 1984, en los Juegos de Los Ángeles, se introdujeron pruebas específicas para mujeres, aunque desde 1968 habían competido en pruebas equivalentes a las masculinas.
Solamente en una oportunidad el tiro no se hizo presente en unos Juegos Olímpicos y fue en Amsterdam 1928, porque poco antes se habían realizado los campeonatos mundiales de tiro. El organismo internacional rector internacional de este deporte es la Unión Internacional de Tiro (UIT), que se formó en 1907.
En el reciente campeonato "Froilán Tantaleán Vásquez" el joven Manuel Briones obtuvo un trofeo que le fue entregado por el presidente Oswaldo Ramírez.
El blanco característico es un cuadrado de cartulina con anillos concéntricos, blancos y negros, alrededor de un centro circular negro. El objetivo en los concursos de tiro al blanco es alcanzar con series de disparos el centro de la diana. Las pruebas de pistola y carabina se realizan con varias clases de armas y calibres. Las pruebas típicas comprenden enfrentamientos individuales y de equipos, para hombres, mujeres y juniors.
La región Lambayeque, a través de los representantes de Sociedad de Tiro Elías Aguirre Chiclayo 77, ha logrado destacar en diversas competencias y el compromiso es seguir brillando con la obtención de medallas en las diversas modalidades.
